Polina
Bastien Vivès
Diábolo Ediciones, 2011
208
páginas / bitono
Cartoné,
19,2 x 27,8 cm
Precio:
19,95 euros
ISBN:
978-84-1515-316-0
Bastien Vivès (París,
1984) es uno de esos autores capaces de satisfacer a los amantes del cómic con
mayúsculas, sea cual sea su pelaje, gusto y condición.
Historietista,
diseñador gráfico, dibujante, ilustrador…, Vivès
es un autor inclasificable. Gracias a obras como Ellas (2007); El
gusto del cloro (2008), con la que consiguió el premio ‘Revelación Esencial’ del Festival de
Angoulême 2009; En mis ojos (2009); Amistad estrecha (2009); o a los
tres tomos de la serie histórica Por el Imperio (2011), donde
comparte autoría con el guionista Merwan
Chabane, está considerado hoy como uno de los dibujantes más prometedores
del cómic europeo.
En
Polina
(Diábolo, 2011), novela gráfica
galardonada con el prestigioso premio de
los libreros franceses el año pasado, el galo consiguió poner de acuerdo a
crítica especializada y aficionados a la hora de declararla ‘novela gráfica del
año’.
En
ella, Bastien Vivès explora el mundo
sobre el ballet y su aprendizaje a través de una tierna historia de amor por la
danza no exenta de dramatismo, de dilemas y de angustias. Está protagonizada por
la dulce y, solo en apariencia, frágil Polina Oulinov, una niña rusa
que aspira a convertirse en bailarina clásica.
Polina vuelve a encerrar muchas emociones. Supone
una narración apasionada sobre el crecimiento personal, sobre la lealtad, sobre
la amistad, sobre los recuerdos y los sueños de la infancia y la adolescencia,
sobre las relaciones con nuestros maestros, sobre la posibilidad de enmendar
los errores cometidos, sobre la nostalgia…
De
nuevo, Vivès, atrapado en sus ansias
de experimentación, cambia totalmente de registro en relación a sus últimos
trabajos, un hecho que resulta tan habitual en las obras del dibujante parisino
como es que sean los personajes femeninos quienes lleven el peso de la
narración. En este punto debe destacarse la personalísima forma de describir a
sus heroínas, siempre desde la inocencia y la curiosidad que suelen encontrarse
en la mirada de un niño. @alvarez_yayo